La presbiacusia es una condición natural del envejecimiento, pero no debe verse como una sentencia de aislamiento o deterioro. Con el diagnóstico adecuado, el uso de tecnología auditiva y el apoyo social, es posible mantener una vida activa, comunicativa y satisfactoria. Reconocer los síntomas y actuar a tiempo es la clave para afrontar la presbiacusia con éxito.
La presbiacusia es la pérdida progresiva de la audición relacionada con el envejecimiento. Es un trastorno sensorial muy común en personas mayores de 60 años, aunque puede comenzar a manifestarse desde los 50. Esta condición suele afectar a ambos oídos de manera simétrica y suele evolucionar de forma lenta, por lo que muchas personas no se dan cuenta de los primeros síntomas.
La causa principal de la presbiacusia es el deterioro gradual de las células sensoriales del oído interno y del nervio auditivo, responsables de transmitir el sonido al cerebro. Este deterioro se debe al envejecimiento natural del sistema auditivo, aunque otros factores como la exposición prolongada a ruidos fuertes, enfermedades crónicas (como la diabetes o la hipertensión), y antecedentes familiares también pueden influir.
SÍNTOMAS MÁS COMUNES
- Dificultad para entender conversaciones, especialmente en lugares ruidosos.
- Necesidad de subir el volumen del televisor o la radio.
- Sensación de que las personas "murmuran" o no vocalizan bien.
- Problemas para oír sonidos agudos, como el timbre del teléfono o el canto de los pájaros.
- Aislamiento social o frustración por no poder comunicarse con claridad.
Cómo afrontar la presbiacusia
Aunque la presbiacusia no se puede revertir, existen múltiples formas de afrontarla y mantener una buena calidad de vida:
1. Acudir a AudiciónPRO by Lázaro, Centro Auditivo Profesional
El primer paso es acudir a un centro auditivo profesional, como el nuestro, para realizar una evaluación auditiva completa. Detectar la pérdida auditiva a tiempo permite tomar medidas adecuadas y frenar su impacto en la vida diaria.
2. Uso de audífonos
Los audífonos suelen ser la solución más común y efectiva. Estos dispositivos amplifican el sonido y se pueden ajustar según el nivel de pérdida auditiva del paciente pero confíe solo en los gabinetes auditivos porque la amplificación o modulación solo se realiza sobre la parte del espectro sonoro que cada paciente está dejando de percibir por sí mismo. Hoy en día existen modelos discretos y muy sofisticados que se adaptan al estilo de vida de cada persona.
3. Terapias auditivas y entrenamiento auditivo
Algunas personas se benefician de programas de rehabilitación auditiva, que ayudan a mejorar la capacidad de escuchar y comprender mejor, especialmente en entornos con ruido.
4. Cambios en el entorno
Adaptar el entorno puede marcar una gran diferencia. Algunas recomendaciones incluyen:
- Reducir el ruido de fondo durante las conversaciones.
- Asegurarse de que haya buena iluminación para facilitar la lectura labial.
- Hablar de frente, vocalizando sin exagerar.
5. Apoyo emocional y social
La pérdida de audición puede afectar la autoestima y las relaciones sociales. Participar en grupos de apoyo o hablar abiertamente sobre el problema con familiares y amigos ayuda a evitar el aislamiento.
Pero el primer paso para solucionar un problema es conocer que existe, de ahí la necesidad de acudir a un gabinete a evaluarse la audición. Le invitamos a que PIDA CITA